lunes, 7 de septiembre de 2009

Retratos

Desde hace unas semanas que vengo dibujando un retrato de mi hija. Aún no lo he acabado.
Lo he repetido 3 veces. La segunda prueba tuve que tirarla a la basura, los otros dos están a medias aún. Se me resiste, sobre todo, uno de los ojos.

El cuadro en sí no está mal pero, mirándolo en conjunto, no es mi hija la que sale, es otra persona. Si no veo a la persona que estoy dibujando prefiero tirarlo a la basura y empezar de nuevo. Este retrato me está costando mucho. Para mí lo importante y más difícil en un retrato es que refleje la personalidad de la persona retratada, todo lo demás me parece secundario.

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